Valeria

Valeria es la Suma Sacerdotisa de Lasir, Pontífice del Fuego Sagrado, y la funcionaria de más alto rango de la nación con la excepción del propio Duque de Lasir. El control de Valeria sobre la Orden del Fuego Sagrado, una organización religiosa fundada por el propio Sagrado Rey Carlos durante su batalla contra el Señor Oscuro, confiere una legitimidad incuestionable a su autoridad. El pueblo de Lasir puede confiar en que la Orden, adoradora de la Luz y el Fuego Sagrados, seguirá guiando al reino en su camino hacia adelante en estos tiempos difíciles y que el Duque cuenta con el apoyo leal de su Suma Sacerdotisa en la defensa de su pueblo.

Valeria desempeñó el papel de una leal emisaria de la Orden durante muchos años antes de su ascenso al Pontificado, viajando por Lasir, difundiendo la Luz del Fuego Sagrado al pueblo, escuchando las quejas cívicas, resolviendo problemas y reclutando más acólitos.

Sus décadas de servicio fueron finalmente recompensadas muchos años después con una coronación como nueva Alta Pontífice ante la aclamación del pueblo y de sus colegas, encantados con la posibilidad de una nueva líder de la Orden tan piadosa. Nicklaus reconoció rápidamente el buen ojo de Valeria para la política y la economía, y Lasir comenzó a prosperar enormemente bajo las diversas reformas de Valeria, lo que finalmente le concedió una promoción de estado vasallo a “Ducado” dentro de la soberanía del Imperio. Valeria se mostró como una piadosa sirviente del gran Duque Nicklaus en la corte durante este tiempo, e incluso él quizá no se dio cuenta del verdadero alcance del poder de Valeria en Lasir y de cuántos de sus objetivos se estaban cumpliendo rápidamente.

“¡Escuchen la voluntad de la Diosa y déjense guiar, oh pobres almas, oh viajeros perdidos!”