Top

< Volver a Noticias

Nicklaus

El visionario estadista conocido por las generaciones posteriores como el “Sagrado Rey Carlos” fue el fundador del Reino de Lasir, aunque su prematura muerte dejó a su pueblo relativamente desprevenido ante las incursiones de otras poderosas ciudades-estado. Lasir acabó derrumbándose ante el dominio del prometedor Imperio de Hirschbuck, que se había expandido rápidamente hacia los reinos vecinos con un poderío abrumador. La antigua superpotencia de Lasir había quedado reducida a un mero estado vasallo del imperio y Nicklaus, descendiente directo del Rey Sagrado, se vio obligado a ganarse el favor de la corte imperial desde muy joven para garantizar la seguridad de su pueblo.

Nicklaus demostró ser una capaz mano derecha del duque: fuerte, seguro de sí mismo y de mente aguda, con grandes ambiciones de recuperar las glorias perdidas de Lasir. Nicklaus llegó incluso a desarrollar una especie de grupo de seguidores entre los guardias imperiales durante su largo periodo como capitán del regimiento Hirschbuck, como corresponde al hijo de un gobernante de cualquier estado vasallo servil. El mando militar de Nicklaus, su experiencia en el campo de batalla y el consejo político que le ofrecía su consejera de confianza, la Alta Pontífice Valeria, hicieron que la fortuna de Lasir aumentara rápidamente en comparación con su imperio “madre” y que se convirtiera en una “república ducal”. Desgraciadamente, la nueva popularidad del duque se convirtió más tarde en una miserable espina para el nuevo y joven emperador Nerón, quien era muy consciente de que las disputas internas de la Corte podían hacer que su posición fuera muy vulnerable a la primera señal de debilidad. El emperador creó un plan para privar al duque de su esposa y su hija, y luego lo apartó del mando imperial y de su regimiento de forma humillante. Incluso entonces, el destino de Nicklaus ya estaba ligado de algún modo al poder oscuro que había más allá del sello cerca de la tumba de su antepasado, ya fuera por los actos del Rey Sagrado o por alguna otra razón. Nicklaus comenzó a escuchar voces tenues, susurros en la oscuridad de la noche que lo alentaban en el camino de la venganza y lo alejaban cada vez más del concepto ideal de gobernante establecido por el Rey Sagrado. La espada de la Guardia Imperial colgaba perpetuamente sobre el Reino de Lasir como un cuchillo en la garganta del pueblo, y tan desesperado estaba Nicklaus por encontrar una solución a sus problemas, que dio oídos al más sacrílego y terrible plan de Valeria.

Novedades

Patch Notes (05/14/2025)

May 13, 2025

Patch Notes (04/23/2025)

April 23, 2025

Patch Notes (04/09/2025)

April 8, 2025